John Wesley Taylor V

La parábola del sembrador y la semilla es una llamada al autodiagnóstico: ¿Cuál es la condición de mi corazón? ¿Pueden las semillas de la Palabra de Dios sobrevivir y dar fruto en mi vida?

Jesús salió de la casa donde se alojaba y se sentó junto al mar de Galilea. En poco tiempo, una multitud ansiosa y expectante se reunió a su alrededor, llevándolo a subirse a un bote. Se sentó en la barca y enseñaba, mientras la multitud permanecía a la orilla del agua. Entonces les dijo muchas cosas en parábolas.¹

La parábola que contó Jesús del sembrador y la semilla es particularmente importante.² Es una de las más largas que relató Jesús, una de las pocas registradas en cada uno de los primeros tres Evangelios,³ y una a la cual Jesús proporcionó una explicación. Además, la parábola recibe una ubicación primordial, encabezando el resto de las parábolas del reino.⁴ Quizás lo más significativo es el hecho de que cuando los discípulos preguntaron sobre el significado, Jesús respondió: “‘¿No entienden esta parábola? ... ¿Cómo podrán entonces entender las demás?’” (Marcos 4:13, NVI).⁵ Esto no quiere decir que esta parábola sea la más fácil de entender, sino que es fundamental. Es la parábola de puerta de entrada, la llave que abre el reino.⁶

EL SEMBRADOR Y LA SEMILLA

“Escucha con atención”, dijo Jesús. “Un labrador salió a esparcir semilla en un campo”.⁷

Jesús la llamó la “parábola del sembrador” (Mateo 13:18). ¿Es importante el sembrador? ¡Ciertamente! La cosecha depende de la siembra.

Quién es el sembrador? Claramente, Cristo es el sembrador. “El que sembró la buena semilla es el Hijo del hombre” (Mateo 13:37).⁸ Nosotros, sin embargo, también somos sembradores. “El sembrador es el Hijo de Dios, o aquel en quien él delega su obra, porque al cooperar con Cristo, hemos de convertirnos en colaboradores de Dios”.⁹ El sembrador entonces, es Jesús y, por extensión, todos los que siembran las semillas del reino.

¿Qué es la semilla? No se nos dice qué tipo de grano se estaba sembrando, pero ¿qué representa? “La semilla”, dijo Jesús, “es la palabra de Dios” (Lucas 8:11). Aquí hay algunas ideas sobre las semillas.

1. ¡Las semillas son milagrosas! Una semilla está viva. En las condiciones adecuadas, una semilla puede permanecer inactiva durante años. Pero después de combinarse con tierra fértil y agua, germinará y crecerá.¹⁰
2. Las semillas son esenciales. Cuando Dios creó el mundo, una de las primeras cosas que hizo fueron las semillas. De hecho, los seres humanos no fueron puestos sobre la Tierra hasta que hubo “hierbas que dan semilla” (Génesis 1:12).
3. ¡No refines la semilla! Un grano contiene varias partes: el salvado, la endosperma y el germen. A veces se quita el germen o el salvado para que el grano sea más sabroso, como se hace para hacer arroz blanco. Sin embargo, si quitas el germen o el salvado, la semilla no brotará.

Finalmente, llegamos al suelo. ¿Qué es el suelo? El suelo representa el corazón de las personas, el corazón de todos. Los cuatro tipos de suelo mencionados en la parábola son cuatro respuestas a la semilla, cuatro condiciones de nuestro corazón.

EL CAMINO: SEMILLAS EN PELIGRO

“Mientras el sembrador estaba esparciendo la semilla, algunas semillas cayeron en el camino transitado. Pronto la semilla fue pisoteada, y los pájaros se abalanzaron sobre ella y la devoraron”.¹¹

El camino normalmente sería a lo largo del borde del campo. A veces, sin embargo, un camino atravesaba el campo. ¿Cómo se creó el camino? El camino endurecido una vez fue suelo blando como el resto del campo. Con el transcurso de los años, sin embargo, fue golpeado por el tránsito: el paso de pies, cascos de caballos y carretas.

¿Qué representa el camino? Jesús dijo que el sendero es “alguien [que] oye la palabra acerca del reino y no la entiende” (Mateo 13:19). ¿Por qué no entienden? Porque no están prestando atención. “La semilla sembrada a la vera del camino representa la palabra de Dios cuando cae en el corazón de un oyente desatento”.¹² En otras palabras, simplemente escuchan, pero no toman en serio la Palabra de Dios.

Lucas añade un detalle significativo. “Al esparcir la semilla, una parte cayó junto al camino; [y] fue pisoteada’” (8:5). Cuando la tierra esté blanda, una pisada enterrará la semilla, cubriéndola y protegiéndola. Pero cuando la tierra se endurece formando el camino, la semilla es pisoteada. ¿Qué significa “pisoteada”? Simplemente significa que hay demasiado tráfico en nuestra vida, que nuestro corazón se ha convertido en una vía llena de gente o cosas.

Entonces los pájaros se abalanzaron. “Mientras iba esparciendo la semilla, una parte cayó junto al camino, y llegaron los pájaros y se la comieron” (Mateo 13:4). ¿Quiénes son los pájaros? “Viene el maligno y arrebata lo que se sembró en su corazón” (Mateo 13:19). ¡Observa que no es un solo pájaro, sino muchos! El diablo tiene innumerables ayudantes. Puede ser un supuesto amigo que se burla y ridiculiza el reino de Dios. “¡Esto es irrelevante!” dice, y de repente la semilla es devorada. “¡Eso es tan ridículo!” se burla, y otra semilla se ha ido.

¿Por qué los pájaros pudieron engullir las semillas? Porque las semillas se quedaron en la superficie. No se habían interiorizado. Existe un gran peligro en no integrar la Palabra de Dios en nuestras vidas. Mientras permanece expuesta, los pájaros la devoran.

El verdadero problema, por supuesto, es el camino endurecido. ¿Cuál es el remedio? “Aren la dura tierra de sus corazones, porque ahora es tiempo de buscar al SEÑOR” (Oseas 10:12, NTV). El suelo duro se puede partir si buscamos a Dios con un corazón abierto, con el deseo de entender su Palabra. Luego, una vez que se haya trabajado el suelo, establece límites alrededor de tus puntos vulnerables. Algunos viejos vínculos pueden necesitar ser cortados; algunos antiguos lugares de encuentro, abandonados.

¡Protege el suelo de tu corazón!

SUELO PEDREGOSO: SEMILLAS EN LAS ROCAS

“Otras semillas cayeron en terreno pedregoso donde no había mucha tierra. Germinaron y rápidamente comenzaron a crecer, ya que el suelo era poco profundo”.¹³

El suelo rocoso al que Jesús se refería no era simplemente suelo fértil mezclado con grava. Las plantas pueden crecer bastante bien en ese tipo de suelo. Más bien, Jesús estaba hablando de una sección de terreno que consiste en una fina capa de tierra sobre un sustrato de roca.¹⁴ El suelo parece ser bueno, pero es superficial.

Jesús observó que cuando la semilla cae en este tipo de suelo, hay una germinación espontánea. “Brotó pronto”, dijo él, “porque la tierra no era profunda” (Marcos 4:5). ¿Por qué la tierra poco profunda hace que la semilla brote rápidamente? Cuando la semilla se siembra en la primavera, el suelo todavía está fresco y la semilla tarda en germinar. Sin embargo, cuando hay roca justo debajo de la superficie y brilla el sol, la roca absorbe el calor. El suelo se calienta y la semilla germina rápidamente.

¿Qué significa “germinación rápida”? “Cuando oyen la palabra, en seguida la reciben con alegría” (Marcos 4:16). El problema no es el entusiasmo. Han perdurado conversiones repentinas, como la de Saulo de Tarso, o Mateo, quien inmediatamente “lo dejó todo y lo siguió [a Jesús]” (Lucas 5:28). Sin embargo, la principal preocupación no es crecer rápido sino mantenerse firme.

Tal vez lo hayas visto suceder. La gente se une a la iglesia. Les encantan los servicios de adoración, la música, el compañerismo. Se lanzan de lleno, cantan en el coro, se ofrecen como voluntarios para la Escuela Sabática y nunca se pierden un servicio. Pasan unos meses, la adversidad golpea, la vida les golpea en la cara, y de repente, estos creyentes apasionados dejan de venir a la iglesia: su asiento está vacío, su rol no se ha cumplido.¹⁵ ¿Te has preguntado por qué? La respuesta es: falta de raíces.

Marcos describe bien el problema: “No tienen raíz en sí” (Marcos 4:17, RVR1960). A veces dependemos de nuestros “padres” para nuestra vida espiritual. Y alabamos a Dios por los “padres creyentes”. Pero cuando estamos lejos de casa, o cuando nuestros padres fallecen, de repente nos marchitamos. Nuestra raíz estaba en nuestros padres. A veces dependemos de un jefe o compañero de trabajo temeroso de Dios, o de un buen amigo que ama a Dios. Pero una vez que cambiamos de trabajo, o alguien compra el negocio, o nuestro amigo se muda, empezamos a desvanecernos. Nosotros mismos no teníamos raíces. A veces dependemos del pastor. Si nuestro amado pastor está ahí para nutrirnos y animarnos, todo está bien. Pero cuando el pastor es llamado a sembrar otro campo, nos alejamos.¹⁶

“Cuando los días se hicieron calurosos, las plantas jóvenes se quemaron. Como carecían de raíces profundas, se secaron y murieron”.¹⁷

La causa del problema no es el sol. La luz del sol es necesaria para que una planta crezca. Lo que demuestra ser una fuente de fortaleza para la planta profundamente enraizada, es devastador para la planta con raíces poco profundas.¹⁸ Donde no hay profundidad, no hay poder duradero. Las plantas se marchitan y mueren. Cuando esto ocurre con los creyentes, están llenos de esperanza, pero no son fieles. Y una fe que no se puede probar, no se puede confiar.

Entonces, ¿cómo echan raíces los creyentes? No es demasiado complicado.

• Lee tu Biblia y ora. Con la comunicación, hay una relación significativa.
• Aprovecha cada oportunidad para la adoración corporativa. Necesitamos escuchar la Palabra de Dios siendo proclamada.
• Participa en un grupo pequeño. Necesitamos experimentar la comunidad bíblica.
• Presta atención a qué y por qué crees. Evita la espiritualidad de segunda mano.
• Pon en práctica lo que ya sabes. Si no vivimos lo que sabemos, ¿por qué Dios debería enseñarnos algo nuevo?

SUELO CON ESPINOS: SEMILLAS ENTRE LA MALEZA

“Algunas semillas cayeron donde crecían arbustos espinosos; y subió la cizaña y ahogó las buenas plantas, de modo que no dieron fruto”.¹⁹

El suelo con malezas y espinos es buena tierra. Si el suelo puede producir malezas prolíficas, seguramente puede producir cereales. Visto de otra forma, el suelo activa la semilla. El mismo suelo que hace crecer el trigo también puede desencadenar la germinación de los cardos.

¿Qué son las malezas? Mateo dice que son “las preocupaciones de esta vida y el atractivo de la riqueza” (13:22, NTV). Lucas añade, “las preocupaciones, las riquezas y los placeres de esta vida” (8:14), y Marcos menciona “el deseo por otras cosas” (4:19, NTV). Entonces, parece que hay al menos cuatro tipos de plantas con espinas:

Preocupaciones de la vida. Nadie está libre de las malezas de la preocupación. El temor a la falta trae perplejidad a los pobres. El miedo a la pérdida trae ansiedad a los ricos. En esencia, todos están preocupados por los afanes de la vida, abrumados por lo que deben hacer y por todo lo que quieren conseguir.²⁰ Este estrés estrangula la semilla y la distrae de la verdadera vida del reino. ¿Qué te preocupa?

Atracción de la abundancia. Vemos lo que otros tienen y nos enfocamos en lo que nosotros no tenemos. En poco tiempo, nos decimos a nosotros mismos lo miserable que es nuestra vida y lo mucho que mejoraría si solo tuviéramos _____(puedes llenar el espacio en blanco). Mateo llama a esto “el engaño de las riquezas” (13:22, RVR1960). Es decir, las riquezas engañan a la gente. “Si tuviera más dinero, mis problemas desaparecerían”. “El dinero me hará feliz”. “¡Tengan cuidado con toda clase de avaricia! La vida no se mide por cuánto tienen”, dijo Jesús (Lucas 12:15, NLT).²¹ Ese sentimiento de vacío cuando la novedad desaparece o cuando el juguete se rompe es una clara indicación de que nada más que una relación con Jesús puede satisfacernos verdaderamente.

Placeres de la vida. La recreación tiene su lugar adecuado. Pero se convierte en una espina cuando el foco de la vida es divertirse, o cuando nuestro llamado se degrada a proporcionar recursos para el placer. Como señaló Elena G. White: “Aquellos que aprenden a amar las diversiones por las diversiones mismas, abren la puerta a un alud de tentaciones... Sus aspiraciones religiosas se enfrían; su vida espiritual se oscurece”.²²

Deseos de otras cosas. Satanás ha configurado un mundo repleto de sensaciones y atractivos, todo para competir por nuestro tiempo y saturar nuestra vida. ¿Qué son estas “otras cosas”? Simplemente, cualquier cosa que se vuelva más importante para nosotros que Dios. Si enfocamos nuestra vida en cualquier cosa, por buena que sea, que no sea “la gloria de Dios” (1 Corintios 10:31), son como espinas, y las espinas son dolorosas. “algunas personas, en su intenso deseo por el dinero, se han desviado de la fe verdadera y se han causado muchas heridas dolorosas” (1 Timoteo 6:10, NTV). Todo parecía bastante inocente al principio. La buena semilla cayó en el suelo y empezó a crecer. La cizaña también brotó y comenzó a crecer. De hecho, las malezas parecían ayudar a las plantas jóvenes dándoles sombra. ¡Pero entonces las espinas declararon la guerra! Verás, solo hay una cierta cantidad de alimento, humedad y luz solar que llega al suelo. Si la cizaña compite por estos recursos, el trigo inevitablemente perderá la competencia.²³

El resultado es que la buena planta “se hace infructuosa” (Mateo 13:22, RVR1960). Fíjate, en una etapa temprana la planta prometía ser fructífera. Pero nunca llegó a la madurez. Su vida espiritual quedó tan ensombrecida por una maraña de prioridades mundanas que quedó en nada.

SUELO FÉRTIL: SEMILLAS QUE DAN COSECHA

“Pero algunas de las semillas cayeron en tierra fértil y produjeron una gran cosecha”.²⁴

Ciertamente, un buen suelo es fertilizado y equilibrado adecuadamente con la cantidad correcta de nutrientes. Pero Jesús no dijo que a alguno de los suelos le faltaran ciertos elementos esenciales que necesitarían ser agrega- dos para hacerla buena. Más bien, en la parábola la buena tierra no tiene más. Tiene menos —menos dureza, menos rocas, menos espinos; menos cuidados, menos preocupaciones, menos distracciones.²⁵

¿Qué representa un buen suelo? “La buena tierra representan a los que oyen y aceptan la palabra de Dios” (Marcos 4:20, NTV). Es un proceso:

1. Escucha la Palabra de Dios. “La fe viene como resultado de oír el mensaje, y el mensaje que se oye es la palabra de Cristo” (Romanos 10:17). Debemos pasar tiempo con la Palabra de Dios.
2. Acoge la Palabra. Debemos creer en la Palabra de Dios y abrazar de todo corazón el plan de Dios para nuestras vidas.
3. Comprende la Palabra. Debemos sacar la Palabra de la página y llevarla a nuestro entendimiento, memorizar las Escrituras y reflexionar sobre ellas.²⁶
4. Permanece fiel a la Palabra. “la parte que cayó en buen terreno son los que oyen la palabra . . . y la retienen; y, como perseveran, producen una buena cosecha”. (Lucas 8:15). El desarrollo espiritual lleva tiempo. No te desesperes cuando los resultados no son inmediatos. Ten paciencia. Sé fiel.

Jesús dijo que la semilla que cayó en tierra fértil produjo una buena cosecha. Algunas rindieron 30 veces, algunas 60 veces y algunas incluso 100 veces más de lo que se había sembrado (Marcos 4:8). Las variedades de cebada antigua de dos hileras rinde 25 a 30 granos por planta, mientras que las variedades de trigo antiguo, como la espelta o einkorn, produce una sola cabeza con 20 a 30 granos.²⁷ En consecuencia, una semilla que rindiera 30 veces tanto sería una cosecha abundante. ¡Un rendimiento de 60 veces habría sido asombroso! ¡Y una semilla que diera 100 veces sería una cosecha por encima de los sueños más increíbles del agricultor!

¿Qué representa la cosecha? Significa que el resultado de escuchar, acoger, comprender y permanecer fieles a la Palabra de Dios será tangible en nuestras vidas. El fruto del Espíritu será evidente.²⁸ Pero hay una segunda aplicación. Cuando compartimos la Palabra de Dios con otros, ocurre la polinización cruzada y la semilla comienza a reproducirse en otros. Cuando eso ocurre, se producen más semillas, semillas que el sembrador puede volver a sembrar.

CONCLUSIÓN

¿Cuál es el propósito de la historia de Jesús? No es para empezar a categorizar a los que nos rodean: “¡Es suelo rocoso!” “Sé que a algunas personas les gusta el camino endurecido”. “Oremos por las personas atrapadas en el terreno espinoso”. A veces, cada uno de nosotros puede tener algo de los cuatro suelos dentro nuestro. La parábola, entonces, es para el autodiagnóstico: ¿Cuál es la condición de mi corazón? ¿Pueden las semillas de la Palabra de Dios sobrevivir y dar fruto en mi vida?

Dios dice: “Les daré un corazón nuevo y pondré un espíritu nuevo dentro de ustedes. Les quitaré ese terco corazón de piedra y les daré un corazón tierno y receptivo” (Ezequiel 36:26, NTV). Lo que hacemos con el conocimiento del reino se reduce a las decisiones que hacemos cada día.

¡La elección es nuestra!

John Wesley Taylor V (Ph.D.) es rector de la Universidad Andrews, Berrien Springs, Míchigan, EE.UU. También es un jardinero comprometido que espera con ansias la cosecha. Su correo electrónico: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo..

Citación Recomendada

John Wesley Taylor V, "El sembrador salió a sembrar.," Diálogo 35:1 (2023): 9-13

NOTAS Y REFERENCIAS

1. Paráfrasis del autor de Mateo 13:1 al 3, integrando pasajes paralelos de Marcos 4 y Lucas 8.
2. Este artículo está basado en Mateo 13:1 al 9, 18 al 23; Marcos 4:1 al 20; y Lucas 8:4 al 15. Perspectivas de: David Brickner, Christ in the Feast of Tabernacles(Chicago: Moody Publishers, 2006); J. Camarin (2013), Sower of the Seed. JCblog.net. ISBN-13: 978-0615841540; Charles Spurgeon, A Sower Went Out to Sow: Sermons on the Parable of the Sower; compilado por Roger McReynolds (Amazon Digital Services LLC, 2017); Michael D. Stover, Jesus and Dirt: A Fresh Look at the Parable of the Sower (Createspace Independent Publishing Platform, 2017); y Elena G. White, Palabras de Vida del Gran Maestro (Mountain View, California: Pacific Press Publishing Association, 1971), de aquí en más referido como PVGM.
3. El Evangelio de Juan no registra ninguna parábola.
4. En Mateo 13 se registran siete parábolas en las que Jesús describe el “reino de Dios” y enseña los principios del reino: el sembrador, la cizaña, el grano de mostaza, la levadura, el tesoro escondido, la perla y la red.
5. A menos que se indique otra cosa, todos los pasajes de las Escrituras en este artículo se citan de la Nueva Versión Internacionalde la Biblia. Santa Biblia, NUEVA VERSIÓN INTERNACIONAL® NVI® © 1999, 2015 por Bíblica, Inc.®, Usado con permiso de Bíblica, Inc.® Reservados todos los derechos en todo el mundo. Los textos acreditados a la NTV se citan de la Nueva Traducción Viviente. La Santa Biblia, Nueva Traducción Viviente, © Tyndale House Foundation, 2010. Todos los derechos reservados. Los textos acreditados a RVR1960 son de la Versión Reina Valera 1960 de la Biblia. Reina-Valera 1960 ® © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988. Utilizado con permiso.
6. Como señaló Elena White: “El gran conflicto entre Cristo, el príncipe de la luz, y Satanás, el príncipe de las tinieblas, se presenta ante nosotros en la parábola del sembrador” (From the Heart [Hagerstown, Maryland: Review and Herald, 2010], 107, traducción propia). En lo sucesivo denominado FH.
7. Paráfrasis del autor de Mateo 13:3, integrando pasajes paralelos de Marcos y Lucas.
8. “Cristo había venido, no como rey, sino como sembrador; no para derrocar imperios, sino para esparcir semillas; no para señalar a sus seguidores triunfos terrenales y grandeza nacional, sino una cosecha que debe ser recogida después de pacientes trabajos” (PVGM 18).
9. FH 107.
10. “Cada semilla tiene en sí misma un principio de germinación. En él se envuelve la vida de la planta. Así que hay vida en la palabra de Dios... El que por la fe recibe la palabra está recibiendo la misma vida y carácter de Dios” (PVGM 20).
11. Paráfrasis del autor de Mateo 13:4, integrando pasajes paralelos de Marcos y Lucas.
12. PVGM 25.
13. Paráfrasis del autor de Mateo 13:5, integrando pasajes paralelos de Marcos y Lucas
14. “Muchos que profesan ser religiosos son oidores pedregosos. Así como la roca yace bajo la capa de tierra, el egoísmo del corazón natural yace debajo del terreno de sus buenos deseos y aspiraciones… Esta clase puede ser fácilmente convencida, y parecen ser conversos inteligentes, pero tienen sólo una religión superficial” (PVGM 27).
15. Adaptado de Stover, Jesus and Dirt: A Fresh Look at the Parable of the Sower,
16. Adaptado de Spurgeon, A Sower Went Out to Sow: Sermons on the Parable of the Sower,90, 91.
17. Paráfrasis del autor de Mateo 13:6, integrando pasajes paralelos de Marcos y Lucas.
18. Adaptado de Stover, Jesus and Dirt: A Fresh Look at the Parable of the Sower,
19. Paráfrasis del autor de Mateo 13:7, integrando pasajes paralelos de Marcos y Lucas.
20. Mateo 6:25–34.
21. Ver también Proverbios 23:4, 5 y Mateo 6:24.
22. PVGM 35.
23. Adaptado de Spurgeon, A Sower Went Out to Sow: Sermons on the Parable of the Sower,
24. Paráfrasis del autor de Mateo 13:8, integrando pasajes paralelos de Marcos y Lucas
25. Adaptado de Camarin, Sower of the Seed,
26. “Pero el que recibió la semilla que cayó en buen terreno es el que oye la palabra y la entiende” (Mateo 13:23). “No es suficiente sólo oír o leer la Palabra; el que desea sacar provecho de las Escrituras, debe meditar acerca de la verdad que le ha sido presentada. Por medio de ferviente atención y del pensar impregnado de oración debe aprender el significado de las palabras de verdad” (PVGM 39).
27. https://www.yara.co.uk/crop-nutrition/barley/barley-categorisation/;https://weizen.uni-hohenheim.de/en/organization/publication/comparative-study-of-hulled-einkorn-emmer-and-spelt-and-naked-wheats-durum-and-bread-wheat-agronomic-performance-and-quality-traits.
28. Gálatas 5:22.

https://dialogue.adventist.org/es/3774/el-sembrador-salio-a-sembrar